El Consejo de la Unión Europea (UE) adoptó hoy recomendaciones actualizadas sobre los viajes a la UE y sobre la facilitación de la libre circulación en la UE durante la pandemia de COVID-19. Con arreglo a las nuevas recomendaciones, los Estados miembros no deben imponer restricciones a los viajes por motivos de salud pública. Sin embargo, las recomendaciones mantienen una serie de salvaguardias en caso de deterioro de la situación epidemiológica.
Viajes desde terceros países
Si fuera necesario para hacer frente a un grave deterioro de la situación epidemiológica, los Estados miembros deberían decidir de manera coordinada restablecer requisitos adecuados para los viajeros antes de su salida. Entre ellos podrían incluirse la vacunación, un certificado de recuperación o de prueba diagnóstica. Los Estados miembros también podrían aplicar medidas adicionales a la llegada, como pruebas diagnósticas adicionales o cuarentena.
En caso de que surgiera una variante preocupante o de interés en un tercer país, los Estados miembros podrían establecer, de manera excepcional, una restricción de viaje urgente, común y temporal o requisitos para viajar. Dicha restricción debería expirar al cabo de veintiún días, a menos que los Estados miembros decidieran acortarla o prorrogarla por un período adicional.
Libre circulación en la UE
Si un Estado miembro considera necesarias restricciones a la libre circulación debido a un grave deterioro de la situación epidemiológica, estas restricciones deberían limitarse a exigir a los viajeros que estén en posesión de un certificado COVID digital de la UE válido. Las personas que no estuvieran en posesión de un certificado podrían tener que someterse a una prueba diagnóstica antes o después de su llegada.
Con el fin de poder reaccionar rápidamente ante nuevas variantes, se mantiene el «freno de emergencia». En tales casos, un Estado miembro podría exigir que los viajeros se sometan a una cuarentena o a una prueba diagnóstica, incluso si están en posesión de un certificado COVID digital de la UE.
Contexto
La UE viene colaborando con los Estados miembros para contener la propagación del virus y ayudar a los sistemas sanitarios nacionales a dar respuesta a la pandemia de COVID-19.
Con el fin de frenar la transmisión del virus, los dirigentes de la UE acordaron, el 17 de marzo de 2020, una restricción temporal coordinada de los viajes no esenciales a la UE, que se aplicó hasta el 30 de junio de 2020. En junio de 2020, el Consejo adoptó una Recomendación sobre la restricción temporal de los viajes no esenciales a la UE y el posible levantamiento de dicha restricción, que se actualizó por última vez el 22 de febrero de 2022.
La decisión de restringir o no la libre circulación para proteger la salud pública es competencia de los Estados miembros. Para evitar una fragmentación y la perturbación de los servicios, y garantizar la transparencia y la previsibilidad para los ciudadanos y las empresas, el Consejo ha adoptado una Recomendación por la que se establecen criterios comunes y un marco común para las medidas aplicables a los viajes. Dicha Recomendación se actualizó por última vez el 25 de enero de 2022.
https://data.consilium.europa.eu/doc/document/ST-15379-2022-INIT/es/pdf
https://data.consilium.europa.eu/doc/document/ST-15535-2022-INIT/es/pdf
https://www.consilium.europa.eu/es/policies/coronavirus/covid-19-travel-measures/